¿Qué es un cáncer maligno de oído?

Un tumor maligno de oído es una enfermedad bastante rara que sólo se desarrolla en una o dos personas de cada millón. Por término medio, un tumor maligno de oído no se desarrolla hasta después de los 55 años. Sobre todo en las fases iniciales, el cáncer de oído es bastante discreto y apenas causa molestias, por lo que sólo se diagnostica en una fase tardía.

¿Qué tumores malignos de cáncer de oído se distinguen?

Los médicos distinguen entre los siguientes tipos de tumores malignos del oído:

  • Carcinoma basocelular: es un tumor del oído externo y suele dar lugar a lesiones ramificadas más pronunciadas y de mayor tamaño. El carcinoma basocelular está causado por una mutación maligna de las células de la capa epidérmica.
  • Carcinoma de células escamosas: se trata con radioterapia o puede extirparse quirúrgicamente.
  • Melanoma: puede formarse en la zona que rodea la oreja, pero también en todo el pabellón auricular, y está causado por la mutación de un tipo de células de la piel llamadas melanocitos.
  • Zeruminoma: es un carcinoma de las células responsables de la producción de cerumen y se forma en el tercio externo del conducto auditivo externo. Aunque un ceruminoma no se extiende a otras zonas, puede destruir el conducto auditivo externo y debe extirparse quirúrgicamente junto con el tejido circundante.

 

El carcinoma basocelular y el carcinoma espinocelular son las formas más frecuentes de cáncer de oído. Si estos dos cánceres se diagnostican en una fase temprana, pueden tratarse con éxito mediante cirugía o radioterapia. El melanoma, en cambio, se extiende muy rápidamente y en algunos casos afecta incluso a la piel del conducto auditivo externo. En ese caso, hay que extirparlo quirúrgicamente.

¿En qué se diferencian los tumores del oído externo de los del oído interno?

Alrededor del 70% de todos los casos de cáncer de oído son tumores del oído externo. Su origen suele ser epitelial, es decir, predominan los carcinomas escamosos en el conducto auditivo externo y los carcinomas epiteliales EPT en el pabellón auricular. En el 80% de los casos de tumores del oído externo, son más frecuentes los del pabellón auricular. En el oído interno, el llamado melanoma es una forma relativamente frecuente de cáncer de oído maligno.

¿Cuáles son las causas del cáncer de oído?

Las causas que pueden provocar un cáncer de oído son diferentes y pueden variar mucho de una persona a otra. Los tratamientos de oído que fueron necesarios a una edad temprana pueden haber dañado la oreja y hacerla más susceptible a un tumor. Pero las estancias prolongadas y repetidas al sol también pueden favorecer los tumores de oído en el oído externo, por ejemplo el carcinoma basocelular.

¿Cuáles son los síntomas del cáncer de oído?

Si hay dolor en el oído durante un largo periodo de tiempo, puede ser señal de un tumor maligno. Además, puede producirse hemorragia en el oído, que puede ir acompañada de picor u hormigueo. Las molestias más típicas que pueden notarse en el oído medio e interno son

  • Inmovilidad del lado de la cara afectado por el tumor de oído,
  • Pérdida de audición,
  • Inflamación de los ganglios linfáticos de la zona del cuello,
  • dolores de cabeza recurrentes

¿Cómo se diagnostica el cáncer de oído?

Diagnosticar el cáncer de oído es difícil en algunos casos, porque los síntomas pueden confundirse fácilmente con otras enfermedades, como una infección de oído. Por lo tanto, si los síntomas ya están presentes, sin duda deben ser aclarados por un especialista. Mediante procedimientos de imagen , como una tomografía computarizada (TC) o una tomografía por resonancia magnética (TRM), se puede examinar el oído con más detalle y determinar el tamaño y la localización del tumor. Para determinar la naturaleza del tejido tumoral, es necesario realizar una autopsia.

¿Cómo se trata el cáncer de oreja?

Pueden utilizarse varias terapias para tratar el cáncer de oreja. Según la localización del tumor, estas opciones de tratamiento pueden variar. Si se trata de un tumor de oído localizado en el oído interno o medio, son posibles las siguientes opciones de tratamiento:

  • Cirugía,
  • Quimioterapia o
  • Radioterapia.

 

Si el tumor está en el oído externo, pueden utilizarse las siguientes terapias:

  • cirugía micrográfica de Mohs: combina el examen microscópico con la cirugía, lo que permite encontrar restos tumorales,
  • Cirugía de los ganglios linfáticos: consiste en la extirpación de los ganglios linfáticos,
  • Otoplastia: fabricación de moldes, por ejemplo para audífonos,
  • Radioterapia: puede utilizarse antes de la cirugía para reducir el tamaño del tumor y después de la cirugía para eliminar las células tumorales restantes.

¿Qué complicaciones pueden surgir?

La extirpación quirúrgica de un tumor de oído es difícil porque el nervio facial atraviesa los lóbulos interno y externo de la glándula parótida. Este nervio controla la expresión facial y penetra en la zona facial. Si este nervio se daña durante la operación, puede provocar una parálisis facial permanente.

¿Cuál es el pronóstico del cáncer de oreja maligno?

El pronóstico del cáncer de oreja maligno puede variar mucho de un paciente a otro. Depende de muchos criterios, como

  • si el tumor está encapsulado y no se ha extendido al tejido circundante,
  • si el tumor crece lentamente
  • si el tumor está situado en el lóbulo externo de la glándula parótida.

 

Si se dan todos estos criterios, aumentan las posibilidades de curación. Sin embargo, uno de cada dos tumores malignos puede volver a formarse incluso después de una extirpación completa con éxito. Por tanto, los pacientes deben acudir a revisiones periódicas después del tratamiento. De este modo, se puede diagnosticar y tratar precozmente una nueva formación del tumor.