
Los espectros de frecuencia: del infrasonido a la radiación gamma
Teaser: La terapia de frecuencia utiliza vibraciones: desde los infrasonidos hasta la luz. Infórmate sobre la base científica de los espectros de frecuencia.
Introducción
Estamos constantemente rodeados de frecuencias: forman la base de nuestras vidas y de todo el mundo físico. Las vibraciones y las ondas están presentes tanto en la acústica como en la gama electromagnética. Ya sea sonido audible, luz visible o radiación de alta energía, cada espectro de frecuencias tiene sus propias propiedades, efectos y ámbitos de aplicación. En este artículo examinamos en detalle las gamas de frecuencias más importantes, con base científica y en relación con la terapia frecuencial.
1. Infrasonido (por debajo de 20 Hz)
El infrasonido se refiere a las vibraciones por debajo de 20 Hz. Estas bajas frecuencias no son audibles para el oído humano, pero pueden percibirse físicamente, por ejemplo mediante vibraciones. En la naturaleza, están causadas por terremotos, volcanes o fenómenos meteorológicos fuertes, por ejemplo. Los estudios demuestran que los infrasonidos pueden tener efectos fisiológicos, incluso sobre el sistema nervioso. Las frecuencias muy bajas también se utilizan en la terapia frecuencial para armonizar el organismo.
2. Sonido audible (20 Hz - 20 kHz)
El rango audible comprende las vibraciones entre 20 Hz y 20.000 Hz. Esta gama es fundamental para la percepción humana, ya que incluye la música, el habla y los sonidos ambientales. Las frecuencias bajas (graves) suelen tener un efecto calmante, mientras que las altas (agudos) tienen un efecto estimulante. En terapia, esta gama se utiliza de forma selectiva, por ejemplo mediante musicoterapia, frecuencias de solfeo o impulsos de frecuencias selectivas, que también pueden tener efecto en los niveles emocional y físico. Se está investigando cómo influyen las frecuencias sonoras en la comunicación celular, sobre todo en el ámbito de enfermedades como el cáncer.
3. Ultrasonidos (por encima de 20 kHz)
Las frecuencias de ultrasonidos superiores a 20 kHz son inaudibles para el ser humano. Se utilizan en tecnología médica (por ejemplo, en la obtención de imágenes por ultrasonidos) y en terapia (por ejemplo, para favorecer la circulación sanguínea o la regeneración de tejidos). Las oscilaciones de alta frecuencia también se utilizan en medicina frecuencial para estimular procesos reguladores.
4. Ondas de radio (30 Hz - 300 MHz)
Las ondas de radio forman parte del espectro electromagnético y abarcan frecuencias de 30 Hz a 300 MHz. Se utilizan para la radiodifusión, la comunicación y el radar. En la terapia de frecuencia, es interesante observar que las ondas de radio pueden resonar con los sistemas biológicos, ya que las células y los tejidos también emiten frecuencias electromagnéticas.
5. Microondas (300 MHz - 300 GHz)
Las microondas son ondas electromagnéticas de alta frecuencia que se utilizan en tecnología (por ejemplo, WLAN, teléfonos móviles, hornos microondas). Científicamente, su interacción con el tejido biológico es de gran importancia, especialmente los efectos térmicos y no térmicos. La investigación sobre la terapia de frecuencia estudia cómo las microondas moduladas específicamente pueden controlar los procesos biológicos.
6. Infrarrojos (300 GHz - 400 THz)
La radiación infrarroja se percibe como calor. Es un componente central de la terapia de calor y tiene una amplia gama de aplicaciones médicas, desde las lámparas de infrarrojos hasta el tratamiento térmico de todo el cuerpo. La terapia de frecuencia utiliza la gama de infrarrojos para favorecer la circulación sanguínea, el metabolismo y las defensas inmunitarias. La hipertermia, que funciona con ondas infrarrojas, también se está investigando para tratamientos contra el cáncer.
7. Luz visible (400 - 789 THz)
El espectro visible abarca desde la luz violeta (~400 THz) hasta la luz roja (~789 THz). Ésta es la gama percibida por el ojo humano. Cada color tiene sus propias cualidades energéticas, que también se utilizan en la terapia del color. La terapia de frecuencia considera la luz como un portador vibracional que interactúa directamente con las células.
8. Ultravioleta (UV, 789 THz - 30 PHz)
La radiación ultravioleta tiene mayor energía que la luz visible y puede influir mucho en los procesos biológicos. Mientras que los rayos UVA penetran profundamente en la piel, los UVB actúan superficialmente y favorecen la síntesis de la vitamina D. La radiación UV se utiliza específicamente en medicina, pero debe dosificarse con cuidado debido al posible daño celular.
9. Rayos X (30 PHz - 30 EHz)
Los rayos X son ondas electromagnéticas de alta energía que se utilizan para la obtención de imágenes médicas. Pueden penetrar profundamente en el tejido y proporcionar información diagnóstica importante. En medicina oncológica, la radiación también se utiliza terapéuticamente en determinadas dosis.
10. Radiación gamma (más de 30 EHz)
Los rayos gamma son las ondas más ricas en energía del espectro electromagnético. Se producen durante procesos de desintegración radiactiva o en sucesos cósmicos. En oncología, se utilizan en radioterapia para destruir específicamente las células tumorales.
La terapia de frecuencia y todo el espectro
La terapia de frecuencia utiliza diferentes gamas de frecuencias para armonizar los procesos biológicos y favorecer la autorregulación. No se trata de "una sola frecuencia", sino de la resonancia con el sistema biológico correspondiente. En el campo de la investigación del cáncer en particular, la cuestión de cómo funcionan las frecuencias a nivel celular y qué potencial terapéutico pueden desplegar es apasionante.
Conclusión
Del infrasonido a la radiación gamma: el espectro de frecuencias es un viaje fascinante por el mundo de las vibraciones. Cada frecuencia tiene sus propiedades y efectos específicos. En la terapia frecuencial, la comprensión de estos espectros abre nuevas perspectivas para los enfoques curativos holísticos. Las frecuencias son portadoras universales de información y, por tanto, una clave para la salud y la conciencia.
Nota: La terapia de frecuencia no está reconocida por la medicina convencional y no sustituye al tratamiento por un médico o profesional alternativo.