¿Qué son las paperas?

Las paperas son una enfermedad infecciosa causada por el virus de las paperas y también se conoce como peter de cabra. El virus se encuentra exclusivamente en humanos. Lo característico de las paperas es la hinchazón e inflamación de las glándulas parótidas. El virus se propaga por todo el mundo, puede aparecer a cualquier edad y está presente todo el año. Gracias a las vacunas protectoras contra las paperas, la incidencia de la enfermedad en Alemania ha disminuido enormemente.

¿Cómo se transmiten las paperas?

El virus se transmite de persona a persona a través de la infección por gotitas. Esto significa que cuando una persona habla, tose o estornuda, pequeñas gotitas se propagan por el aire y son inhaladas por una persona sana. Las paperas también pueden contraerse por contacto directo, por ejemplo al besarse. La transmisión por frotis, como al compartir vasos o platos, es algo menos frecuente.

¿Cuándo aparecen las paperas y durante cuánto tiempo se considera contagiosa la persona?

El periodo de incubación suele ser de unos 16 a 18 días. Sin embargo, también es posible un periodo de 12 a 25 días. Se te considera contagioso desde una semana antes y unos nueve días después de la aparición de la inflamación parotídea. El riesgo es mayor después de unos dos a cuatro días del inicio de la enfermedad. No importa si no hay síntomas o sólo síntomas leves.

¿Cuáles son los síntomas de las paperas?

No todas las personas infectadas presentan síntomas. En aproximadamente 4 de cada 10 personas, la infección de paperas sigue su curso completamente sin síntomas. Los niños en particular, con menos de 5 años, sólo presentan síntomas de un resfriado normal, si es que presentan alguno. En otros casos, aparecen muchos más síntomas:

  • Pérdida de apetito,
  • Inflamación de las glándulas parótidas,
  • Hinchazón en la zona de las mejillas,
  • Hinchazón en la zona de la garganta.

 
Sin embargo, estos síntomas suelen desaparecer al cabo de tres a ocho días.

La inflamación de las glándulas suele causar dolor, y muchos enfermos también experimentan dolor de oído debido a la presión sobre el conducto auditivo. Abrir la boca e incluso masticar puede causar dolor. En casos especialmente graves y dolorosos, es aconsejable que el paciente sólo coma alimentos líquidos o muy blandos, como papillas, sopas o purés. En muchos enfermos, también se inflaman los ganglios linfáticos vecinos.

¿Cómo se diagnostican las paperas?

Normalmente, el médico reconoce las paperas inmediatamente por los síntomas. Especialmente la característica inflamación de la glándula parótida no suele dejar lugar a dudas de que se trata de una infección por el virus de las paperas. Sin embargo, dado que la enfermedad de las paperas se ha vuelto mucho más rara, al menos en Alemania, a menudo se solicita un examen de laboratorio para tener una certeza absoluta. El examen es especialmente esencial si la persona afectada ha sido vacunada contra las paperas. Un análisis de sangre puede detectar anticuerpos especiales contra el virus. Si hay una infección aguda de paperas, suelen encontrarse anticuerpos IgM específicos. Son detectables los primeros días tras el inicio de la enfermedad y el nivel puede ser incluso elevado unas semanas después de la enfermedad.

Sin embargo, si una persona ha sido vacunada, la prueba de IgM puede dar un resultado falso positivo. En estos casos, se recurre a una detección adicional del virus. Para ello, se examina un frotis faríngeo o la orina en busca del material genético del virus.

¿Cómo se tratan las paperas?

Actualmente, no existe ningún tratamiento antivírico para las paperas. La enfermedad suele tratarse sintomáticamente con analgésicos y antifebriles. Si el paciente tiene fiebre, debe beber suficientes líquidos y guardar reposo en cama. En algunos casos, las paperas pueden provocar complicaciones, como inflamación testicular. En este caso, también se aplica el reposo en cama y la elevación y enfriamiento del testículo. En casos muy graves, el médico puede prescribir medicamentos antiinflamatorios. Si se desarrolla pancreatitis como consecuencia de la infección de paperas, la persona afectada debe ser tratada en el hospital. En algunos casos, es necesaria la alimentación artificial, al menos temporalmente. El tratamiento en el hospital también es necesario en el raro caso de meningitis cerebral.

¿Cuál es el pronóstico de las paperas?

Por regla general, el pronóstico de las paperas es bueno. En su mayor parte, la infección es leve e inofensiva, sobre todo en los niños. Sin embargo, las complicaciones y los efectos tardíos aumentan con la edad. Por ejemplo, la inflamación de los testículos relacionada con las paperas puede reducir la fertilidad. Sólo en casos raros los niños o los hombres serán completamente infértiles después. Alrededor del 4 % de los afectados experimentan sordera en la gama de tonos agudos. Esto suele ser temporal, pero en una de cada 20.000 personas infectadas de paperas, la sordera permanecerá de por vida. La inflamación cerebral causada por las paperas rara vez es mortal. La encefalitis de las paperas mata aproximadamente al 1,5% de los afectados.

¿Cómo puedes protegerte de las paperas?

La mejor protección contra las paperas es y sigue siendo la vacunación. Se recomienda en la infancia y debe realizarse con un total de tres dosis de vacunación. Si olvidas o te saltas una vacunación, es esencial que te la pongas lo antes posible antes de cumplir 18 años. La vacunación no sólo sirve para protegerse uno mismo contra las paperas, sino también para evitar que otros las contraigan.

¿Hay obligación de notificar las paperas?

Las paperas son de declaración obligatoria en Alemania desde 2013. En caso de sospecha de enfermedad, enfermedad demostrada o fallecimiento en relación con las paperas, los médicos deben emitir una notificación al departamento de salud pública, indicando el nombre de la persona afectada. Si la persona afectada asiste o trabaja en una institución comunitaria, como una guardería o escuelas, la dirección de éstas debe ser informada por ella misma o, en el caso de los niños, por los padres. A continuación, la dirección del centro debe remitir la correspondiente notificación a la autoridad sanitaria. La autoridad sanitaria decidirá, en última instancia, cuándo se permite al paciente volver a visitar o trabajar en una institución de este tipo.